En entornos altamente competitivos es imprescindible que las empresas sepan cómo abordar los momentos de crisis e incertidumbre. En este artículo, algunas claves sobre cómo sortear las adversidades para llevar transparencia y confianza a los empleados.
En la actualidad, muchas empresas se enfrentan a un entorno dinámico en materia de oferta, demanda y competitividad. Con el boom del desarrollo digital, las soluciones de inteligencia artificial (IA) y las ventas online (entre otros grandes cambios), distintas compañías se han enfrentado a fuertes modificaciones estructurales y han tenido que adaptar sus recursos.
Según el sitio Ey Latin America, la principal preocupación externa para las empresas del continente es el crecimiento económico: más de un 35% se ha mostrado en alerta respecto a este tema y un 29% aseguró que su principal desafío es incrementar su participación de mercado.
En un momento de alta incertidumbre a raíz de la competitividad entre compañías, cada empresa debe saber gestionar la inestabilidad, apelando a la confianza de los empleados y a la transparencia en cuanto a los conflictos, la toma de decisiones y las soluciones a implementar.
La incertidumbre laboral es entendida como la falta de conocimiento o certeza respecto de algún tema relacionado con el ámbito profesional, lo que genera dificultades en la toma de decisiones por el contexto incierto.
La incertidumbre puede deberse a factores externos, políticos, económicos, sociales o ambientales, o internos, como cambios en la estructura de la compañía o nuevos rumbos profesionales. Comprender los distintos tipos de incertidumbre hará que pueda tomar decisiones informadas a futuro para superar los períodos de inestabilidad.
Si bien cada tipo de incertidumbre responde a variables, problemas y soluciones específicas, existen algunas claves para abordar la inestabilidad y llevar tranquilidad a los empleados.
En cada caso es primordial que se mantenga una visión realista de la situación y evitar caer en escenarios catastróficos: cambiar la perspectiva, tomar nota de los hechos concretos a favor y en contra y escribir en un papel posibles soluciones son solo algunos de los consejos en este tipo de circunstancias.
Según un informe del sitio IFeel Humanising Growth, el 42% de los empleados lucha con ansiedad en el trabajo: los momentos de alta inestabilidad no hacen más que aumentar el estrés y es responsabilidad de cada líder el poder acompañar a los trabajadores en los períodos de crisis. Para esto resulta indispensable el desarrollo de habilidades duras como blandas. Mientras que las primeras hacen referencia a lo relacionado con el ámbito laboral en sí, la segunda está ligada a la empatía, el generar confianza y el saber escuchar. Mostrarse transparente respecto a las dificultades con los demás le permitirá abrirse a recibir soluciones y sugerencias por parte de todo el equipo profesional.
Al mismo tiempo, estar actualizado en las tendencias de la industria aportará una cuota diferencial al momento de resolver conflictos, sobre todo si se trata de aquellos problemas ligados al entorno económico y comercial. En este sentido, ser receptivo y estar abierto al cambio permitirá mayor adaptación a cualquier determinación que se tome, sea a corto o largo plazo.
Como se mencionó anteriormente, mostrarse transparente, lejos de ser una señal de debilidad, denota interés por el bienestar de la empresa: generar una red de profesionales interesados en mejorar la compañía brindará distintas perspectivas resolutivas para un mismo conflicto, y puede llegar a mejores soluciones de manera más rápida y eficiente.
Para lograr gestionar con eficiencia la incertidumbre será necesario desarrollar sólidas capacitaciones que tengan un gran impacto en los equipos. Existen diferentes opciones según el objetivo y el tipo de empresa, y estas permiten a las organizaciones tener nuevas herramientas para enfrentarse a contextos inestables.
No todas los cursos de capacitación son iguales. Cada empresa deberá analizar cuál será la indicada que se adaptará a sus necesidades específicas. Algunas pueden darse de forma presencial, virtual o mixta; en grandes o pequeños grupos; a través de talleres prácticos, cápsulas, presentaciones o incluso conferencias.
Por eso, a la hora de planificar una capacitación para incorporar herramientas, hay que evaluar las distintas variables que determinarán cuál es la mejor forma para incorporar conocimiento y aprendizaje. Aquí es donde aparecen empresas especializadas como Intelego. ¿De qué se encargan específicamente? De crear soluciones y experiencias de aprendizaje a medida que reúnen técnicas, estrategias didácticas y las últimas herramientas tecnológicas para diseñar y producir grandes materiales para el entrenamiento de los colaboradores.
Sin importar el tipo de incertidumbre del que se trate, manejar la inestabilidad en el mercado laboral frente a los empleados supone comprender las últimas tendencias, estar al pendiente de las demandas de la industria y requiere de una buena dosis de comunicación con los trabajadores.
En Intelego ofrecemos soluciones de crecimiento en desarrollo profesional que te permitirán abordar las demandas del entorno empresarial actual y los desafíos a futuro, sean a corto o a largo plazo. Si te gustaría crear una solución de capacitación que ayude a gestionar la incertidumbre en tu empresa, contáctanos y descubre lo que nuestras experiencias personalizadas de aprendizaje pueden hacer tu empresa.